Renato Guzmán
Una niña de 14 años de edad, perteneciente al Cártel del Noroeste afirmó haber sido entrenada para disparar y vender droga, sin embargo, lo que realmente disfrutaba era matar gente.
Mariana N., aseguró haber matado y torturado a cientos de mujeres, mismas a las que les destrozaba la cara a balazos frente a sus hijos.
La menor nació y creció en Monterrey, donde sus principales tareas constaban de buscar y reclutar a más niños que no les importara en lo absoluto matar o morir a cambio de grandes cantidades de dinero.
Las reglas eran simples, de no tener compasión con nadie, no consumir drogas de otros grupos delictivos y cumplir con cierta cuota de asesinatos durante el día. Fue así como a la edad de 10 años, Mariana y su hermana comenzaron a dedicarse el narcomenudeo para ayudar a sus familias.
"Yo no quería vender droga, yo quería matar personas" afirmó.
Mariana disfrutaba hacer un trabajo que supuestamente era solo para hombres. Fue a sus 15 años cuando decidió salirse del Cártel del Noroeste para dedicarse al narcotráfico, sin embargo, no duró mucho y al poco tiempo fue detenida. Hoy se encuentra en internamiento y rehabilitación, afirma querer continuar con sus estudios y estudiar criminología, ya que se arrepiente de sus pasado.