JUCHITÁN, Oaxaca.- Para la próxima temporada de jaibas, cientos de pescadores de la zona lagunar huave-zapoteca, se podrán ver beneficiados por una comercializadora que se ha interesado en adquirir toda la producción que se logre este año.
Así lo dio a conocer el impulsor de este proyecto, hace más de seis años en la comunidad de Playa Vicente, Mariano Rosado López, quien señaló que para este año esperan tener una buena producción, gracias a la reapertura de la boca barra, que realizaron el 15 de septiembre del año pasado.
Por su calidad, la carne de la jaiba azul que se obtiene en esta laguna, es una de las mejores a nivel mundial por esa razón es muy apreciada y se exporta hacia los Estados Unidos y China.
Para poder comercializarla, será necesario que las cooperativas pesqueras estén reguladas para que puedan facturar toda la producción que obtengan este año, a partir de octubre a diciembre.
“La temporada de vientos fuertes favorece bastante la captura de la jaiba azul. Tenemos mucho optimismo que este año habrá buena producción, como en otra época cuando entregábamos de cinco a siete toneladas diarias”.
Los pescadores de Playa Vicente, Ejido Zapata, Chicapa de Castro y otras comunidades como Santa María Xadani, San Dionisio del Mar donde abarca la zona lagunar, cuentan ya con experiencia en la captura de la jaiba, pues aprendieron a confeccionar sus jaulas.
“Hace cinco años nos capacitaron para elaborar nuestras jaulas y con ellas capturar una mayor cantidad de jaibas a menor costo”, señaló el integrante de una de las dos cooperativas pesqueras que aglutina unos 200 pescadores de Playa Vicente.
Para este año, esperan fijar un precio justo con la empresa que, además, podría instalarse permanentemente en la región, basados en la importancia que tendrá la zona con el proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
Hace una semana, Rosado López se reunió con Luis Ronay Aguilar Chiu, especialista en alimentos marinos y gerente comercial de la empresa Pescados y Mariscos del Caribe con sede en Mérida, Yucatán, donde sentaron las bases para asegurar la comercialización de la jaiba azul y se espera que en una próxima reunión se fije el precio de garantía.
